Síntesis y comentarios sobre un informe de «The Economist» sobre emprendedorismo

A pesar de la crisis mundial, el emprendedorismo disfruta de un renacimiento alrededor del mundo. La aspiración de los emprendedores no es sólo hacerse rico; ellos quieren jugar un rol importante en el forjamiento de un nuevo mundo. El emprendedorismo es una fuerza poderosa tanto para hacer el bien como para obtener resultados (for doing good as well as doing well).

En 1942 Joseph Schumpeter dio la alarma sobre los peligros de la burocratización del capitalismo y la posibilidad de matar el espíritu emprendedor.
En vez de tomar los riegos de la “destrucción creativa”, los economistas keynesianos aunaron a las grandes corporaciones con los grandes gobiernos, afirmando que podían proveer orden y prosperidad.

Las perspectivas han cambiado y todo hace suponer que los emprendedores schumpeterianos están una vez más, conectándose por el globo.
Desde la revolución reaganeana-teacheriana de los ochenta, los gobiernos de casi todas las ideologías han abrazado el entrepreneurismo.
Reforzado por una creciente infraestructura de universidades y capitalistas de riesgo y corporizado por salvajes héroes de negocios populares, la actividad emprendedora necesita transformarse significando más una creación creativa que una destrucción creativa.

El mayor productor de emprendedores en el mundo sigue siendo los EEUU, pero desde allí se ha esparcido por casi todo el mundo su evangelio. La globalización del emprendedorismo está ganando competitividad para todos, particularmente en el mundo rico. Los emprendedores pueden surgir de casi cualquier lugar, incluyendo las alguna vez cerradas China e India. Muchos de ellos alcanzan los mercados globales gracias al desplome de los costos de la revolución del ITC.

Para mucha gente el término emprendedor significa simplemente que alguien empieza un negocio, desde un local en una esquina hasta un high-tec start up.
Existe una definición más restringida y es la de alguien que ofrece una solución innovativa a un (frecuentemente desconocido) problema.

Un emprendedor no se define por el tamaño de la empresa sino por el acto de la innovación. Esta definición tiene un impresionante pedigree intelectual comenzando por Schumpeter. Peter Drucker, el distinguido gurú del management, lo definió como alguien que “desordena y desorganiza”, “el emprendedor innova”, dice. “La innovación es el instrumento específico del emprendedor”.

William Baumol uno de los economistas claves en este campo, lo describe como “el atrevido e imaginativo desviador de los patrones y prácticas de negocios ya establecidas”.
Howard Stevenson, el hombre que más hizo por promover el estudio del emprendedorismo en el Harvard Business School, lo definió como “la persecución de oportunidades más allá de los recursos que usted actualmente controla”.

El emprendedor innovativo no sólo es más interesante que su tipo replicativo. También tiene más peso económico porque genera más empleo. El emprendedorismo está lleno de malentendidos; cinco de los cuales son particularmente persistentes:

  • El primero afirma que los emprendedores son “huérfanos y parias”. De hecho, el emprendedorismo es una actividad social como cualquier negocio. El emprendedor puede ser más independiente que cualquier vendedor de traje que sigue las reglas, pero de todas manera necesita de socios, proveedores y clientes para sobrevivir. El emprendedorismo se verifica mejor a través de clusters. Una tercera parte del venture capital americano fluye en Silicon Valley y en Boston. Y dos tercios si sumamos a cuatro ciudades más: New York, Los Angeles, San Diego y Austin.
  • El segundo mito es que la mayoría de los emprendedores recién han abandonado los pantalones cortos. La Kauffman Fundation ha estudiado 652 jefes de compañías norteamericanas y ha encontrado que el promedio de edad era de 39 años cuando ellos comenzaron. El número de fundadores arriba de 50 era dos veces mayor que el de debajo de 25.
  • El tercer mito es que el emprendedorismo es financiado principalmente por el capital de riesgo. Este mecanismo ciertamente es importante en los emprendimientos de capital intensivos tales como lo high-tec y la biotecnología. Además el venture capital puede proveer al emprendedor de consejo, contactos y habilidades de management además de dinero. El dinero que financia a los emprendedores es por lejos el endeudamiento personal o las denominadas tres f (Friends, Fools and Families).
  • El cuarto mito es que para ser exitoso un emprendedor debe producir algún producto que cambie el mundo. La verdad es que los más exitosos emprendedores se han concentrado en procesos más que en productos. Y más aún en procesos que permitan que el cliente se encuentre más satisfecho.
  • El quinto mito es que el emprendedorismo no puede florecer en las grandes compañías. Existen muchas compañías que intentan funcionar como un conglomerado de emprendedores y les va bastante bien. Nokia, Johnson&Jonhson son algunos ejemplos. Otras grandes compañías obtienen la innovación de los emprendedores a partir de la construcción de un ecosistema donde ellas funcionan como venture capital e inversor angel. Muchas farmacéuticas y telcos trabajan de esta manera.

Pero, ¿por qué tanto entusiasmo por el emprendedorismo cuando el mundo se hunde en su peor crisis desde 1930?

Hoy los clientes son difíciles de encontrar, los proveedores tienen menos márgenes de maniobra y el capital es difícil de juntar. En América la inversión en venture capital fue un 33% menor que el año anterior. El riesgo, la sangre que da vida al emprendedor es algo que debe ser evitado. Para los emprendedores, en las crisis tienen más oportunidades que el resto porque ellos son cazadores de oportunidades.

La era de la información está haciendo más fácil para la gente común empezar un negocio y más difícil para los ya establecidos defender su territorio.

En 1960 la composición del S&P 500 era tan estable que tomó 20 años para que un tercio de las compañías constituidas cambiara. Hoy toma sólo cuatro años. Hay muchas razones para esto.

  • En primer lugar, la revolución de la infor
    mación ha ayudado a individualizar a las compañías existentes. En 1937, Ronald Coase argumentó en su “La Naturaleza de la Firma” que las empresas tienen sentido cuando el costo burocrático de realizar transacciones bajo un techo, es menor que el hacerlo separadamente a través del mercado.
  • En segundo lugar, el crecimiento económico está siendo conducido cada vez más por industrias hambrientas de innovación.
  • En tercer lugar, las economías avanzadas son caracterizadas por el paso de la manufactura al servicio. Las empresas de servicios son generalmente má pequeñas que las manufacturas y tienen menores barreras de entrada.

Microsoft, Genetech, Gap y The Limited fueron todas fundadas durante recesiones. Hewlett-Packard, Geophisical, Service (hoy Texas Instrument), United Technologies, Polaroid y Revlon nacieron durante la depresión.

Las encuestas de opinión sugieren que los emprendedores ven tanto el lado bueno como el malo de las recesiones.
En una encuesta realizada por Endeavor, 85% de los emprendedores afirmó que se vio fuertemente afectado por la crisis y el 88% opinó que lo peor está por venir. Pero ello también proyectaron que su negocio crecería un 31% y que aumentarían su plantel en un 12% este año. La mitad de ellos piensa que podrá reclutar mejor gente y el 39% dice que habría menos competencia.-